Por el rescate del edificio central del Instituto de Ciencias y Artes de Oaxaca
*Comprueban abandono total de inmueble patrimonio histórico de la humanidad
*Reconocimiento a Ángel Soriano en sitio sagrado de la inteligencia nacional
Don Benito Juárez y el General Porfirio Díaz no sólo fueron alumnos del Instituto de Ciencias y Artes de Oaxaca –fundado en 1816-, sino alumnos laboraron en su biblioteca –hoy Biblioteca Francisco de Burgoa- para sufragar sus estudios; por sus aulas pasaron connotados diplomáticos como Emilio O. Rabasa y Matías Romero; médicos como Aurelio Valdivieso y don Ramón Pardo.
Escenario de luchas políticas e ideológicas, la institución que viera pasar por sus aulas a Juárez como trabajador, alumno, catedrático y director, hoy se encuentra en completo abandono. Las aulas acumulan polvo y exhiben huellas de la barbarie: preciosas puertas que antes fueron de hierro forjado, obras artísticas de caoba, frescos en sus paredes y techos, con huellas de cenizas por los atentados que ha sido objeto.
Miles de visitantes extranjeros que recorren el andador turístico entran con temor por la única puerta de madera que está abierta sobre la calle de Alcalá y comprueban la acción de la barbarie en una de las entidades con mayor riqueza natural, artística, gastronómica y racial. Nadie hace nada por rescatar esta joya arquitectónica, histórica y cultural.
En ese escenario , el vicepresidente de la Academia Nacional de Historia y Geografía, patrocinada por la UNAM, Ulises Casab Rueda, el secretario académico Armando Toledo y Saulo Chávez, presidente de la ANHG-Oaxaca, así como Mario Medina Torres y César Bolanos Cacho, de la Asociación Nacional de Locutores-delegación Oaxaca, entregaron un reconocimiento a la trayectoria periodística de Ángel Soriano Carrasco.
Al presentar su trayectoria, el ex líder estudiantil universitario Raúl Castellanos Hernández propuso que el edificio central de la UABJO se convierta en un museo o se promueva su restauración para disfrute de propios extraños y se le rescate del abandono; en el mismo sentido se pronunció el arquitecto Rafael Vergara Rodríguez, promotor de la declaratoria de Patrimonio Cultural de la humanidad de la ciudad de Oaxaca. Acudió también al evento el cronista de la ciudad, escritor Jorge Bueno.
Castellanos Hernández, líder de la FEO, la más importante organización estudiantil del 68, reconoció el acompañamiento de María Teresa Ibarra Obando como esposa de Ángel Soriano en 42 años de matrimonio.
Otros dirigentes universitarios como José María Yáñez Gatica recordaron las históricas luchas sociales de la UABJO en la década de los 70 “de las que Ángel Soriano informó con objetividad e imparcialidad, y fue uno de los pocos, por no decir que el único, que hizo la crónica con la verdad”.
El Dr. Ulises Casab Rueda destacó, en el emblemático paraninfo del edificio central de la UABJO, las virtudes desconocidas del Benemérito de América, don Benito Juárez, rector supremo de la máxima casa de estudios.
Hubo congratulación por la realización de la ceremonia en un sitio histórico, por cuyas aulas pasó la inteligencia nacional que aportó con sus hombres hazañas que forjaron la Patria, en opinión del periodista Alfredo Martínez de Aguilar. Entre notros destacados universitarios concurrieron Andrés Avelino Soriano Montes, Cipriano Flores, Juan Maldonado Vargas, periodistas como Jaime Arizmendi, Felipe Sánchez, Abundio Núñez Sánchez, Claudia Martínez, Cornelio Merlín, Humberto Torres, Diego Bautista, entre otros.